Si es verdad que Menorca es la isla del viento, ¿qué mejor que recorrerla en un barco de vela? Entre su pasado inmutable de monumentos prehistóricos y su presente que contempla el modo en que el mar resiste el tiempo, hay algo en la más oriental de las Baleares que se impregna en la piel de quien la visita. Nuestro recorrido comienza en Ciudadela. Desde la terraza del bar Tritón, bajo la antigua muralla de la ciudad y del no menos imponente edificio del ayuntamiento, observamos a los paseantes mientras vamos pensando en la cena.
Categorías:
Etiquetas:
0 comentarios
¿Quieres comentar? Regístrate o inicia sesión