Lucía Ibáñez y su marido, Tony Bastian, dejaron hace tres años su vida en Madrid, donde él trabajaba como agregado agrícola de la Embajada del Reino Unido en España, para enfrentarse al reto de convertir una pequeña explotación ganadera del pueblo montañés de Tudes (Cantabria) en un establecimiento de turismo rural, conservando tanto su ambiente rústico como, en la medida de lo posible, su estructura original. La rehabilitación fue apoyada por el programa de desarrollo rural Proder Cantabria, cofinanciado por la Unión Europea. La Casa de las Chimeneas, como se ha bautizado el complejo, recibió a sus primeros huéspedes hace algo menos de un año.
Categories:
Tags:
0 comments
Do you want to comment? Sign up or Sign in