Convengamos en una obviedad: Sicilia es un destino obligado. Es difícil, si no imposible, encontrar en Europa otro lugar que concentre en tan escaso territorio un álbum tan variado de épocas artísticas, contrastes paisajísticos y maneras de buen vivir. Pero como todo buen destino tiene dos inconvenientes: es caro y está atestado en verano. Para solventarlos, solo hace falta una buena planificación y visitarla fuera de temporada (hasta mayo).
Categorías:
Etiquetas:
0 comentarios
¿Quieres comentar? Regístrate o inicia sesión