Las plantas siderúrgicas, las instalaciones mineras, las centrales eléctricas, las presas, las bodegas, las industrias textiles o las empresas de elaboración de componentes electrónicos no son tan antiguas como las catedrales góticas, pero pueden ser igual de fascinantes. Espacios insólitos, complejas maquinarias, estructuras de hierro, ladrillo y hormigón; motores, chimeneas, turbinas, ruidos y colores. Nuestra sociedad, cada vez más volcada en el trabajo del sector terciario, se acerca con curiosidad y sorpresa al mundo de la industria y los procesos productivos, y empieza a descubrir su inmenso atractivo.
Categories:
Tags:
0 comments
Do you want to comment? Sign up or Sign in